REALIZAMOS NUESTRO CAMPAMENTO DE VERANO 2.007

El pasado domingo 26 de agosto los miembros del grupo scout Eryteeia que hemos asistido a nuestro tradicional campamento de verano, volvimos a la Isla, tras pasar siete días de convivencia en Vejer de la Frontera.

Fue el pasado lunes 20 cuando desde muy temprano se empezó a congregar los participantes en la sede del grupo del colegio San Ignacio, con la mochila cargada de los útiles necesarios, aderezados con un montón de ilusión.

Tras un corto trayecto en autobús y una pequeña marcha, el contingente llegó hasta el lugar de acampada. Este primer día se dedicó al montaje de toda la infraestructura necesaria.

El martes, tras ultimar los detalles del montaje, se dedicó el día a conocer el medio natural en que nos encontrábamos, realizando salidas de descubierta por el entorno. Ya este día estaba operativa la cocina de campamento, la cual preparó la comida de todos los acampados.

Otras de las actividades típicas de un campamento scout es la celebración de días dedicados al conocimiento de otras culturas, dedicándose el miércoles a celebrar el día africano. Ese día todo estaba relacionado con dicha cultura; disfraces, comida actividades, juegos, etc…

El jueves tocó el día de las rutas, las cuales dependiendo de la edad de los acampados tienen mayor o menor dificultad. Los más pequeños, castores y lobatos, se desplazaron desde el lugar de acampada hasta el centro urbano de Vejer, donde visitaron sus plazas y el castillo, donde los scouts de esa población tienen su sede y que se encargan de servir de guía a los visitantes. Tras el regreso después del almuerzo, los pequeños scouts, disfrutaron de un merecido descanso en la piscina y de numerosos juegos.

Los más mayores, los troperos, se desplazaron hasta la playa de los Caños de Meca, atravesando el Parque Natural de la Breña, realizando el regreso por la tarde noche en una marcha nocturna.

El viernes fue un día de descanso, dedicándose a actividades de menor actividad física, como talleres de repostería, cabuyería, manejo de herramientas y juegos. A medida de que pasaba este día los participantes se daban cuenta que el final de la acampada se estaba acercando a gran velocidad y que los compañeros con los que habían convivido estos días pronto se tendrían que separar. Los sentimientos de amistad y compañerismo fueron palpándose en el ambiente cada vez más fuertemente.

El sábado era el gran día que culminaría con el Fuego de Campamento. Esta actividad, que se llama así porque era cuando se encendía una hoguera y se realizaban actuaciones, mantiene el nombre, si bien el fuego no existe por prevención.

Este día también se dedicó a recoger lo máximo posible, desmontando la máxima infraestructura para facilitar la salida. El riesgo de lluvia y la pequeña llovizna de la tarde no impidió que los planes siguieran adelante.

El domingo fue el día más vertiginoso, teniendo que desmontar lo que nos quedaba de las tiendas y cocina y realizando la batida del lugar para dejarlo en mejores condiciones de cómo nos lo encontramos, ya que esta es una de las máximas del escultismo.

Antes de salir hacia el autobús, llegó el momento de las ceremonias donde varios de los acampados realizaron su promesa y también se hizo la ceremonia de pasos de sección, siendo este el momento más emotivo, ya que se formaron nuevos grupos de trabajo, creandose por primera vez en la historia del grupo scout Eryteeia los “escultas” que son los jóvenes de 14 a 16 años.

Tras la foto de familia se abandonó la zona de acampada con la ilusión de volverse a ver para iniciar un nuevo curso scout lleno de actividades, compañeros y emociones.